21/09/2020
El proyecto de rehabilitación integral se adjudicará por 2,76 millones más IVA y un plazo de ejecución de 18 meses
Los fondos FEDER y el Ayuntamiento impulsan este proyecto “que sitúa a las personas mayores en el eje de las políticas del bienestar, los servicios y el urbanismo”, indica Amparo Marco
Audio de Amparo Marco
El Ayuntamiento de Castelló ultima la adjudicación de la reforma integral de la actual Casa de la Cultura de la calle Antonio Maura para transformarla en un Centro de Envejecimiento Activo y Saludable referente en la provincia. La actuación, cuyo acuerdo de adjudicación ha pasado hoy por comisión de estudio y que tiene que ser ratificado en una posterior Junta de Gobierno Local, es una de las de mayor impacto social de las doce cofinanciadas con los 20,2 millones de euros de fondos municipales y europeos que se invertirán en la capital hasta 2022.
El proyecto de rehabilitación del emblemático edificio se licitó por 3,14 millones más IVA y, según el acuerdo que ha pasado este lunes por comisión de estudio y que se elevara a la Junta de Gobierno Local para su ratificación, se propone la adjudicación a Becsa S. A. por 2,76 millones más IVA y un plazo de ejecución de la obra de 18 meses. El proyecto supone una inversión global de 4.102.100 euros, pues al presupuesto de ejecución de las obras se suman 760.000 euros para equipamiento y puesta en marcha de los servicios. Un montante cofinanciado por el Consistorio y los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (FEDER) a través de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI).
“Castelló avanza con paso firme hacia un modelo de ciudad inclusivo y amable, como muestran los avances para materializar el futuro Centro de Envejecimiento Activo y Saludable, que sitúa a las personas mayores en el eje de las políticas del bienestar, los servicios y el urbanismo”, ha indicado la alcaldesa, Amparo Marco.
Marco ha recordado que esta actuación “de fuerte sello social” y que servirá para recuperar y poner en valor uno de los edificios más emblemáticos de nuestro casco histórico, acercará a la ciudadanía “más de 2.200 metros cuadrados de servicios para potenciar la vida comunitaria y el aprendizaje intergeneracional”.
El futuro centro busca optimizar las oportunidades de salud, participación social y seguridad de las personas mayores que promueve la OMS para garantizar un envejecimiento activo. También mejorar su calidad y esperanza de vida saludable y ampliar su red de apoyo social.
Las nuevas dependencias recaen sobre las calles Antonio Maura (donde se ubicará el acceso principal), Enmedio e Isabel Ferrer. Sus usos, espacios y servicios se han perfilado a través de la participación de 71 particulares y 11 colectivos ciudadanos.
La planta baja acogerá un punto de orientación e información, la cafetería, un salón de actos para cien personas, una sala de exposiciones y zona housing. La primera planta desplegará un área de actividades lúdicas, una sala de lectura y otra de estudio y dos aulas polivalentes. El gimnasio, una sala de actividad física, el servicio de peluquería, fisioterapia y podología, junto a talleres polivalentes y una zona de estimulación sensorial, se ubicarán en la segunda planta. La tercera estará reservada a despachos, sala de reuniones, el área de dirección y administración y una sala de ensayos insonorizada. Otro de los atractivos del nuevo centro es la recuperación de la azotea, donde se implementarán terrazas y zonas de descanso y un huerto urbano.
Desde el punto de vista arquitectónico el proyecto destaca por su complejidad, al tratarse de cuatro edificaciones inicialmente independientes que serán integradas en un inmueble único y 100% accesible. Se preservan también las fachadas dado el grado de protección del inmueble.
Como elementos singulares, el nuevo Centro de Envejecimiento Activo y Saludable de Castelló contempla una red de patios interiores para aportar luz natural y ventilación a todas las estancias.
Teniendo en cuenta la perspectiva de género y las condiciones físicas de las personas mayores, se han dispuesto servicios higiénicos generales en cada planta separados por sexos y aseos adaptados específicos; así como zonas de circulación horizontal evitando recorridos largos y acotándolos con espacios de espera y una cuidada iluminación. Prima además la instalación de puertas automatizadas.