31/10/2016
El equipo de gobierno se compromete a solicitar una nueva revisión catastral en 2017 y a crear el Consejo Municipal de Inspección.
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Castellón ha aprobado hoy la revisión de las ordenanzas fiscales para 2017 planteada por los grupos municipales de PSPV-PSOE, Compromís y Castelló en Moviment, integrantes del "Pacte del Grau". Para realizar esta revisión se constituyó antes del verano un grupo de trabajo integrado por los cinco grupos municipales en el que se han ido aportando diferentes propuestas hasta llegar a la revisión aprobada.
El concejal de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo, ha explicado que la principal medida es la reducción del gravamen del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a las familias en un 5%, pasando así del 0,7875% al 0,7475%, "lo que compensa, en cierto grado, el incremento que año tras año sufre este impuesto como consecuencia de la revisión catastral solicitada por el PP".
También se incluye la bajada del tipo de gravamen de rústica en un 25%, del 1,07 al 0,80%. Otra modificación planteada es el incremento del tipo del IBI hasta el 0,85 para el 5% de los inmuebles de uso no residencial con valores catastrales más altos. Por último, también se aumenta el tipo de gravamen que debe pagar el puerto en un 5,4% pasando del 0,8538% al 0,90%.
La revisión incorpora una modificación de las bonificaciones fiscales a las familias numerosas, que tendrá un carácter más progresivo, al contemplarse tanto el valor catastral del inmueble como la renta familiar. De esta forma, en función de los ingresos de la familia habrá cinco tramos de bonificación entre el 12 y el 60%; y en función del valor catastral del inmueble habrá otros cuatro tramos de bonificaciones que oscilarán entre el 12 y el 30%. De modo que la bonificación máxima que podrá tener una familia en el IBI se mantendrá en un 90%. En el caso de las familias numerosas con algún miembro en situación de dependencia se establecerá el máximo de bonificación por renta, independientemente del valor catastral de la vivienda objeto de la bonificación.
Bonificaciones para actividad cultural y social.
Con respecto al IBI también se ha aprobado una bonificación del 30% para los inmuebles cuya actividad declarada esté relacionada con la cultura, como una forma de compensar el elevado IVA cultural establecido por el Gobierno del PP. Se beneficiarán las galerías de arte, librerías, salas de cine, teatros, salas de conciertos e inmuebles destinados a la producción y representación cultural.
También una bonificación del 30% en el IBI a los inmuebles destinados a uso social (cesión gratuita o alquiler social a familias en riesgo de exclusión o en proceso de inclusión), tras la certificación de la Concejalía de Bienestar Social.
Y una bonificación comprendida entre un 10 y un 25% a todas las edificaciones de uso residencial en las que se hayan instalado sistemas para el aprovechamiento eléctrico de la energía proveniente del sol. Esta bonificación se aplicará los 5 años siguientes al de la finalización de su instalación, manteniendo el carácter progresivo atendiendo al Valor Catastral del inmueble.
ICIO y plusvalías.
En el caso del Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras, con el objetivo de incentivar las obras de reforma de inmuebles antiguos, se pl la reducción del precio de casi todos los módulos adecuándolos a los precios actuales de mercado.
En cuanto al Impuesto por el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (plusvalía), ya que en diciembre de 2016 finaliza la bonificación del 40% en los valores catastrales de los terrenos de naturaleza urbana que aprobó el Gobierno Central en 2012, el ayuntamiento, para cumplir con su compromiso de no incrementar la presión fiscal, aprobará nuevos tipos de gravamen que compensarán esta supresión.
Tasa de recogida de residuos sólidos.
La tasa de recogida de residuos sólidos urbanos contempla un ligero incremento medio que compensa en parte la subida en el coste del servicio y que tomará como referencia el valor catastral de los inmuebles. De esta forma 35.000 viviendas con un valor catastral más bajo no verán incrementado el recibo de la basura; las 35.000 con mayores valores catastrales tendrán una subida en su recibo en 9,2 euros, y a las 17.500 viviendas restantes, con valores medios, les subirá 4,61 euros el recibo.
También se contempla la creación de un epígrafe diferenciado para las familias en situación de exclusión social, así sólo pagarán el 20% de la cuota que deberían pagar teniendo en cuenta el valor catastral de su vivienda. Por ejemplo, una familia en riesgo de exclusión social pagaría 18,42 euros al año frente a los 92,10 euros de tasa normal.
En el caso de las familias numerosas también existe una bonificación del 15% de la tasa de residuos a aquellas viviendas beneficiarias de un 60% o más de bonificación por familia numerosa en el IBI.
Revisión catastral.
La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, ha mostrado su satisfacción por esta revisión fiscal y ha agradecido la labor de los grupos políticos y los funcionarios de la casa. Marco ha explicado que "con este tipo de medidas avanzamos en un doble objetivo: reducir progresivamente la carga fiscal a toda la ciudadanía y conseguir que paguen menos los que menos tienen y más los más favorecidos económicamente".
La alcaldesa también ha anunciado que al margen de las ordenanzas fiscales, el Gobierno Local se compromete a solicitar a la Gerencia del Catastro una nueva ponencia catastral en 2017 para ajustar los valores de los inmuebles a la realidad del mercado actual.
Por último ha avanzado la inminente creación del Consejo Municipal de Inspección para impulsar la lucha contra el fraude tributario de modo que podamos detectar los nichos de fraude y actuar en consecuencia. "Porque si conseguimos que paguen todos aquellos que tiene que pagar, todos pagaremos menos" ha afirmado Marco.