13/01/2019

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La alcaldesa de Castelló resalta que el proyecto, con 1,4 millones de euros de presupuesto, salvará la barrera urbanística entre los barrios de la zona oeste y mejorará la movilidad.

La construcción del nuevo puente del río Seco de Castelló afronta una de sus fases más decisivas con el montaje de las tres vigas que sustentarán y perfilarán el esqueleto de esta estructura sobre las 420 toneladas de peso que suman. Un puente pensado para conectar barrios y eliminar la barrera urbanística que aún existe en la zona oeste de la capital de La Plana. Con 1.433.000 euros de presupuesto y cofinanciada al 50% por el Ayuntamiento de Castelló y los Fondos Europeos de Desarrollo Regional (Feder), la plataforma mejorará la movilidad urbana entre la avenida Alcora y el Raval Universitari y acercará servicios a la ciudadanía de uno y otro margen del río. El proyecto contempla además la ampliación de la rotonda de la avenida Alcora, que imprimirá fluidez al tráfico que transita por este vial.

"Estamos ante uno de los momentos más destacados de la construcción del nuevo puente del río Seco, un proyecto singular incluido en la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi), que ha inyectado gracias a la colaboración entre el Ayuntamiento y Europa un total de 20,2 millones de euros en nuestra ciudad, la mayor cuantía de su historia", ha explicado la alcaldesa, Amparo Marco. "El puente es un paso más en la construcción de una ciudad moderna, más accesible y con una movilidad más sostenible al incluir carril bici y zona peatonal junto a los dos viales reservados para tráfico rodado", ha señalado la alcaldesa.

Las tres vigas de hormigón prensado, de 42,7 metros de longitud y 140 toneladas de peso cada una, llegarán a Castellón directas desde Huesca durante el lunes 14 y el martes 15 de enero. De manera inmediata se procederá al montaje con la ayuda de una grúa de 500 toneladas. Juntas permitirán en escasos días vislumbrar ya el perfil del puente y el nuevo acceso de Castelló por su vertiente oeste.

Desde la empresa Becsa, ejecutora del proyecto, indican que se trata de un tipo de viga "bastante habitual" para la fabricación de puentes. "Hemos buscado ante todo que sea una estructura funcional", apunta por su parte el director de las obras e ingeniero de Caminos municipal, José Valls.

El nuevo puente del río Seco tiene 41,5 metros de longitud, 6 de altura y 14,6 metros de ancho, y enlaza la avenida Alcora con la prolongación de la calle Jesús Martí Martín, en el Raval Universitari. Incorpora dos carriles de circulación, carril bici y paso peatonal, aparcabicis, zona ajardinada, pérgolas con sombra, mirador y pasos de peatones con tecnología led. Incluye la ampliación de la rotonda ubicada en el cruce de la avenida Alcora y Quadra Saboner, de 24 metros de diámetro interior, con calzada de dos carriles de 4 metros y arcenes de 0,50 metros.

Se trata de una infraestructura para crear ciudad y transformarla en un espacio más transitable, vivible, cómodo. Para unir, conectar a las personas y avanzar en la consecución de un modelo urbanístico innovador y sostenible. Su finalidad es eliminar la barrera urbanística que aún separa la zona oeste del resto de la ciudad, conectar barrios (Crèmor y Raval Universitari) y acercar dotaciones y servicios públicos a la ciudadanía para mejorar la calidad de vida y facilitar el día a día a quienes viven a uno y otro lado del río y, por extensión, a todas las personas que transitan por esta zona urbana.

Se prevén medidas de ordenación del tráfico para favorecer la prioridad del paso de residentes. La materialización del proyecto promoverá además la rehabilitación y revitalización de barrios de la segunda mitad del siglo XX, como Crèmor y los anexos a la avenida Alcora.