31/07/2017
La iniciativa fue puesta en marcha en febrero por el Ayuntamiento con el objetivo de proteger a este colectivo de posibles incendios.
El Ayuntamiento de Castellón ha finalizado este mes de julio la instalación de los 190 detectores de humo que empezó a colocar en febrero en los hogares de personas mayores dependientes. Esta iniciativa, impulsada por las concejalías de Bienestar Social, Salud Pública y Seguridad Ciudadana, pretende proteger a este colectivo ante posibles incendios en sus viviendas, ya que es uno de los más vulnerables ante este tipo de accidentes.
La colocación de estos dispositivos ha contado con un presupuesto de 2.400 euros, que ha sido totalmente asumido por la Concejalía de Salud Pública. Los Servicios Sociales han sido los responsables de remitir a los Bomberos Municipales, los encargados de su instalación, el listado de personas que cumplen las características del colectivo al que va dirigido este proyecto: personas mayores de 80 años que viven solas o con personas también de avanzada edad o en una circunstancia similar y que se encuentran en una situación de dependencia y vulnerabilidad.
Este colectivo tiene un mayor riesgo de tener un descuido o sufrir un accidente que puede derivar en un incendio, y por sus condiciones pueden tardar más en darse cuenta de lo que sucede y también en reaccionar. Hasta el momento, aquellos que se han beneficiado de esta iniciativa son los usuarios del Servicio Municipal de Ayuda a Domicilio (SAD) y de la Teleayuda Municipal, además de otras personas de las que Servicios Sociales tiene constancia de su situación.
Los detectores de humo, que han sido instalados en diferentes ubicaciones de los hogares según las características de las viviendas, son unos pequeños aparatos que avisan cuando se produce un incendio o se acumula una cantidad peligrosa de humo. Además, también emiten una alerta sonora, que avisa tanto a las personas que viven en la casa como a los vecinos, y otra lumínica, para personas sordas o con problemas de audición.
Está previsto que los dispositivos estén conectados al servicio de teleasistencia cuando este esté en marcha. En caso de que ocurra algún accidente, el detector de humo se conecta a una central de alarma que permite activar los servicios de emergencia necesarios. Los Servicios Sociales son los encargados de la supervisión del proyecto, de los equipos de teleayuda y del seguimiento anual y del recambio de pilas de los dispositivos. Con estas medidas preventivas, el Ayuntamiento pretende mejorar la calidad de vida de las personas mayores en situación de dependencia y vulnerabilidad.